lunes, 1 de octubre de 2012

En el ojo del ojo (Ese paraíso sordo).

En el ojo del ojo (Ese paraíso ciego).

Ella aprendió a jugar con sus ojos y los lleva alimentando.
En la muerte de tu Dios nace la redacción prolifera y te moldeas poeta, abitando el amargo néctar de lo real.
 Naciste de entre los normales y al tercer día odiaste todo mecanismo que te traslado y te comunico en falsa saliva. Vez mucho trajesito bailando entre cristales de plástico  Esos perros nunca sudan por amor, ni conocen del dolor de la luz terrenal, ni celestial. Nunca se enfurecieron con sus manos.
 Y ríen sin entender,
desviándose solo con sus experiencias de vida.
 Este lunático sube la piedra una y otra vez, y al bajar es consiente de su condición de poeta.
Así como el Sísifo Sagitariano, santo de aquella guerra. Quien sometió a la muerte y no temió a los Dioses.

Rápidas y fugases todas las luces y mis parpados empiezan a caminar cansados.
 El absurdo constante de buscar una razón.
Al final el héroe es natural y es esclavo.
 En los rincones mas barbaricos es donde me someto a la verdad, que nunca esta vestida.
Sigo el filo de los días...
¿Por que a de importarme morir?, si nunca me a  importado el nacer.
 ¿Quien te dijo que no soy el peor, quien te dijo que no soy el mejor?
Si soy los dos, si soy el mismo.
En que risa se esconde el absoluto de las coincidencias.
Quien mastica cuadriculas en la tormenta.
Si te hago pensar, porque yo no quiero que pienses.
La tensión de la atención y las jugadas de esta scaramanzia ajedrecista.
Plum!
Dice el derrumbarse!
Adios!
Dice la esperanza.
Castidad de celos, incertidumbre del libre, mermelada del solitario, carne del sometido.
Aquí estoy, allá estaré, aquí volveré y allí iré. eterno replantarse.
Mi piedra es la bondad.
Mi cuesta abajo mi venganza.
Pero siempre llevo esa piedra, siempre.
Maldito Sísifo,
Es el precio de los valientes...
Es el precio de los malditos,
Es el precio del perdedor.
Pero es el héroe natural y esclavo.
Ese que no se pierde a si mismo.


Dedicado a todos los poetas y malditos, a Leo, a Kevin.
 y a Bicha, por poeta por sabia, por su nombre.

                                                  GRULLIO POZARLI.






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