Que si sueno cursi ¿Y?

Total, si conozco que tengo un tridente de obsidiana archivado en un gran barco
construido de piel de mosca,
el que llevo en el bolsillo de agua
de mi saco tejido con tinta
Ese que aveces encuentras en el respaldo de la silla de baba;
Ahí donde me paro a leer realismo sucio
mientras limpio mi carabina de espejo, con cerveza oxidada;
Siempre que vuelvo de pasear en el lavar-ropas
ese pintado con carne putrefacta de libélulas del lago de Ophiuchus.

Y amanezco con una resaca de fuertes chupetines de caramelo, luego de ducharme en el libro de Hermes,
con cenizas y tiznes húmedos.
 Y también bailo un rato, escuchando silencio.
Con el aire me rasco
Y patino frenado
Y me resbalo seco
y trituro ensamblando
¿Y? Que hay de (y)
¿Y? cursi si ni la palabra cursi es cursi.
Si dar es dar;
Si el mar habla con el cenicero, si, ese, que le inicio el juicios a la botella de whisky que estaba sin abrir y llena.
Acusándola de que lo había mojado y encima el cigarrillo que estaba descansando porque una bocanada había abuso de él, le envió una carta documento al cenicero, porque también reclamaba justicia, porque según él, había sido mojado mientras reposaba en propiedad del cenicero.
Pero claro, felino domestico lo libero al empujarlo de la mesa, y caído al piso, destrozado, no podían saber si seguía siendo un cenicero y empezaron a dictar nuevas leyes y.... Por cursi nadie pudo ver nada.


Dedicado a León baldo (Un gran amigo) Y a la rubia futura filosofa esa de la noche en el varieté, esa acuariana, que acoto y opino que Fito sonaba cursi. 
                                                                                                           
                                                                                                         Grullio POzarli.